Renee Montgomery: Movimientos que hacen reflexionar

De todos los movimientos que se hacen en el básquetbol, no hay ninguno más poderoso que el pivoteo. Se trata de encontrar el momento, ese único segundo, en el que todo el juego se abre y puedes cambiar de dirección, hacer un pase o encestar. Así es como se cambia el destino de los partidos y se crean campeones. También es la forma en que Renee Montgomery hizo historia como primera ex jugadora en convertirse en propietaria y vicepresidenta de un equipo de la WNBA.

Renee encontró su momento en 2020 durante el movimiento Black Lives Matter. Después de dos campeonatos de la WNBA y una carrera de 11 años como jugadora profesional, Renee vio lo que le estaba pasando a la comunidad Negra de nuestro país y se cuestionó su propósito, como atleta y como ser humano. "Estaban ocurriendo muchos disturbios civiles", recuerda, "y eso me hizo preguntarme cuál era mi papel". Decidió colgar su jersey y pasar la temporada averiguando qué era lo que tenía que hacer."

Empezó a hacer otros tipos de movimientos. Al encontrar la fuerza en su voz, habló sobre la justicia social en su nombre y en el de los demás. "Para mí es importante usar mi voz porque algunas personas no se sienten cómodas usando su voz", afirma. Escribió una carta abierta a los propietarios de su equipo, el Atlanta Dream, sobre las injusticias raciales que estaba presenciando. Se presentó a las protestas y e informó a las personas sobre la importancia de su voto. Sin embargo, no estaba satisfecha con su impacto. Todo el mundo hablaba de que el sistema iba a tardar mucho en cambiar, pero yo me preguntaba: "¿qué sucede con el hoy y el ahora? Y entonces surgió el concepto de la propiedad".

Al ganar impulso como activista y líder en su comunidad, Renee encontró su oportunidad para pivotear. Empezó a verse a sí misma como propietaria y como alguien que podía crear un cambio desde arriba, utilizando todo lo que sabía sobre el trabajo en equipo, la comunicación y los valores compartidos para poner sobre la mesa eso que faltaba. "Quiero que las jugadoras se sientan escuchadas, darles una voz", señala. Después de trazar una estrategia y establecer contactos con otros miembros de la liga, lo hizo realidad.

Llevando su defensa a nuevas alturas como ejecutiva del Atlanta Dream, Renee se propuso establecer una nueva era en el básquetbol femenino: una en la que una atleta negra y LGBTQ+ pueda liderar un equipo y un movimiento al mismo tiempo. Fundó Renee's Runs, una liga informal de mujeres en Atlanta, Georgia, para desarrollar la comunidad del básquetbol femenino y pasar el balón a la siguiente generación de atletas. Para muchas mujeres, desde jugadoras ocasionales hasta ex atletas profesionales, Renee's Runs es un espacio en el que pueden empoderarse mutuamente, conectarse y crecer. "Trabajamos juntas y construimos juntas, y para mí, esos son los objetivos a los que debemos apuntar", dice Renee.

En un mundo que busca definir a los atletas por sus logros en la cancha, Renee nos muestra que a veces, son los movimientos que hacemos fuera de la cancha los que cambian el juego positivamente. "Dediqué mi vida al básquetbol porque me encanta. Y sentí que era una vía para hacer cosas diferentes. Pero cada pequeño momento que las personas agregan al anterior continúa el movimiento y el impulso. Ese momento no tiene que ser una protesta. Ese momento puede ser cualquier cosa. Solo tienes que crear".